Llegar a vender millones de dólares y cotizar en bolsa, no ha sido un camino fácil y Steve Madden, empresario y fundador de su marca homónima, lo sabe perfectamente.
Su camino inició en la adolescencia, cuando trabajaba en el sótano de una tienda de zapatos lo que lo llevaría a enfocarse en el mercado del calzado.
En el camino del emprendimiento hubo malas decisiones que lo llevaron a pasar un tiempo en la cárcel. Llevar una empresa desde una situación delicada no fue fácil, nos contó que sin su maravilloso equipo de trabajo, no hubiera sido posible. “Ellos capitalizaron demasiado mientras yo estuve fuera de mi puesto”
Y que comprendió que los momentos donde la esperanza y la necesidad se alinean, pueden salir cosas increíbles. “Te vuelves más creativo cuando tienes que tratar de pagar la renta, esa fue mi motivación anteriormente, y es el pensamiento de mucha gente exitosa que conozco”
Es un hombre que su mente está centrada en su negocio. Las tendencias y los tiempos se mueven demasiado rápido y encontrar inspiración “es una tarea cada vez más difícil”, nos confesó. Aunque “Siempre hay que ser honestos con nosotros mismos”
Steve nos aseguró que actualmente el hombre que usa un par de zapatos de su marca, es aquel que tiene cualidades como el diseñador mismo. Es un hombre que trata de hacer su camino en el mundo, tratando de ser una figura emprendedora y con sentido del humor.
Detrás de una gran empresa, siempre viene una mente maestra que ha pasado por situaciones difíciles para poder llegar a la cima. Sin duda, Steve Madden es uno de ellos y su éxito va para una sola dirección: en subida.
