#GameChangers Alexa Moreno

Correr a casi 25 km/h, impulsar el cuerpo con una pirueta y, aprovechando la velocidad, ejecutar giros y caer de pie, lista para saludar. Esta es solo una de las actividades que la gimnasta artística mexicana Alexa Moreno ha perfeccionado durante años.

El deporte local encontró en ella a una Game Changer necesaria. Su nombre se popularizó en 2016, cuando participó en su primera justa olímpica, Río de Janeiro, aunque con un tono de conversación muy negativo en redes sociales y medios de comunicación. Entonces, superó críticas hacia su físico y se convirtió en abanderada de la tolerancia y el respeto, al tiempo que mejoraba sus resultados y técnica, sobre todo en salto de caballo, el aparato que la ha puesto en el spotlight internacional, además de las tres medallas de oro en Juegos Panamericanos, el bronce en el Mundial de Gimnasia de Doha de 2018, y el oro y la plata en los Juegos Centroamericanos.

Apenas el pasado 17 de septiembre se coronó en la Copa Mundial de Gimnasia Artística en Francia. En la Final de la prueba de Salto de Caballo Femenino, Alexa fue la ganadora de la presea dorada con una puntuación de 14.075, con lo que dejó atrás a la australiana Georgia Godwin y a la francesa Coline Devillard.

El retiro de Moreno se acerca, ya que recientemente confesó que después de París 2024 la gimnasia artística competitiva ya no será su prioridad. Quizá el deporte siga en su día a día, o tal vez decida crecer en el mundo de la arquitectura, disciplina que le apasiona y de la que tiene un título universitario.

Lo cierto es que, a donde sea que vaya, los mexicanos le reconocerán la valentía, el empuje y el aguante para no rendirse, incluso después de que las peores palabras y deseos llegaban a sus oídos desde su propio país.

¿Por qué la elegimos?

No solo representa a México en un de- porte olímpico tan exigente como la gimnasia. Alexa Moreno también se ha elevado como una figura de cambio en las nuevas narrativas de respeto, tole- rancia, salud mental y deportividad.