La Selección Mexicana ha estado en la mira de la FIFA y otros organismos en los años recientes a partir de la expresión homofóbica que realiza la afición cuando se da un saque de meta por parte del rival. Este grito ya le ha generado importantes erogaciones a la Federación Mexicana de Futbol y la Selección Nacional de México en pago de multas y juegos a puerta cerrada.
Sin embargo, de repetirse en Estados Unidos, esto les podría afectar sus juegos en el vecino país, donde la escuadra mexicana realiza sus juegos prácticamente como local ante una afición que paga en dólares y repleta los estadios para ver al "Tri".