Kyrgios, gran juego y muchas tretas
Djokovic tiene un impresionante balance en finales de Wimbledon, donde solo ha perdido una, en 2013, de las siete que ha disputado.
Busca ahora su cuarto título consecutivo en el Grand Slam sobre hierba -el torneo se canceló en 2020 debido a la pandemia- para sumarse al exclusivo club formado por Bjorn Borg, Pete Sampras y Roger Federer.
Pero para ello tendrá que superar el peligroso juego y las habituales tretas de Kyrgios, clasificado automáticamente el jueves cuando Nadal anunció que no podía continuar debido a una lesión en la zona abdominal.
Djokovic, a sus 35 años, buscará su 21ª victoria en un Grand Slam frente al 40º tenista del mundo, quien no ha disputado nunca una final de estos grandes torneos.
"Nunca le gané un set antes. Espero que esta vez sea diferente. Voy a jugar otra final en Wimbledon, espero que la experiencia juegue en mi favor", deseó el serbio.
El australiano, de 27 años, está abonado a las polémicas.
Además de rechazar tener un entrenador y no participar en muchos de los torneos del año, ha dado mucho que hablar por su comportamiento en las pistas.
Voy a jugar otra final en Wimbledon, espero que la experiencia juegue en mi favor
Novak Djokovic
En la tercera ronda de Wimbledon protagonizó un muy tenso partido contra el griego Stefanos Tsitsipas, que perdió los nervios por el "circo" de comentarios y quejas de Kyrgios y acabó lanzando una bola en dirección del público y otra de la pared.
Ambos jugadores fueron amonestados y multados por su comportamiento.
Tsitsipas lo tildó de "abusón" con "un lado diabólico", pero desde entonces el australiano ha mostrado una actitud más comedida.
"Espero que tu recuperación vaya bien y todos esperamos verte en buena salud pronto", le deseó a Nadal en un mensaje de Instagram.
"Obviamente nunca quieres ver a alguien así, tan importante para el deporte, caer con una lesión como esa", dijo el viernes en rueda de prensa.
"Estoy seguro de que volveré a jugar con él en un gran escenario", agregó, asegurando que "todo el mundo quería vernos ir a la guerra" sobre la hierba de Wimbledon.
Esa batalla la tendrá que disputar ahora el australiano contra uno de los tenistas que más ha ganado en el All England Club y que busca su 21º título de Grand Slam para ponerse a solo uno de Nadal.
El serbio tiene además la motivación de que este será probablemente su último torneo de Grand Slam del año, ya que sin vacunarse contra el covid-19 no podrá viajar a Estados Unidos para disputar el US Open.