Aquellos que han seguido el Universo Cinematográfico de Marvel desde sus primeros pasos recordarán que hubo un tiempo en que Thor se sentía fuera de lugar. Era claro que la franquicia no terminaba de descifrar el modo de trabajar a un dios en un mundo regido por la ciencia, la tecnología y el espionaje, decantándose por un toque shakesperiano que fue mermando su identidad y su popularidad.
'Thor: Amor y trueno': Un nuevo viaje entre dioses y hombres
El camino sólo empezó a enmendarse cuando Taika Waititi tomó las riendas de la franquicia individual y reemplazó de tajo el dramatismo por el humor y una tenue irreverencia. Thor: Ragnarok fue un éxito absoluto, uno de los mayores en toda la franquicia, y que convirtió además al asgardiano en uno de los personajes más populares del universo marvelita. La buena racha continuó con Avengers: Infinity War y Avengers: Endgame, y aspira a extenderse todavía más con Thor: Amor y trueno que figura entre las cintas más esperadas de toda la Fase Cuatro.
Son muchas las razones por las que la película ha generado tan altas expectativas, tantas que es virtualmente imposible nombrarlas todas. Estas incluyen el deseo de las audiencias por continuar el viaje de un héroe cuyo éxito individual tomó demasiado en llegar; las risas garantizadas, pero también la identificación provocada por un personaje plagado de dudas y en continua búsqueda de sí mismo; el continuar el viaje de un dios cada vez más humano tras conocer de cerca el dolor de la pérdida y el fracaso; la presencia de los Guardianes de la Galaxia; el regreso de Natalie Portman a la franquicia en el rol de superheroína; ni qué decir de la incorporación de Christian Bale con el que promete ser uno de los grandes villanos de toda la saga; la nostalgia ante la que podría ser la última aventura individual de otro Vengador original… Repetimos, la lista es interminable.
Sorpresas desde Asgard
Taika Waititi suele caracterizarse por su humor y desenfado, por eso uno no puede sino sorprenderse cuando el director se pone serio, aunque sea por unos instantes, para asegurar que él mismo quedó sorprendido por el nivel de Thor: Amor y trueno. Esto tras explicar que “no trato de controlar mis películas, o cómo resultan. Dejo que se me aparezcan. Y con esta película, estoy como, 'Oye, eres un poco más genial que lo que originalmente esperaba hacer'. En cuanto al tono, está donde siempre lo he querido”.
La cinta mostrará al Dios del trueno buscando una propia identidad por primera vez en su larga existencia. Ya cedió el trono de Asgard y ahora debe decidir entre continuar luchando por el bien o retirarse en busca de la paz interior. Reflexiones que se ven interrumpidas por dos sucesos inesperados: el reencuentro con una Jane Foster dotada con el poder de Thor y la amenaza de Gorr en su búsqueda de venganza contra los dioses.
El regreso de Natalie Portman a la franquicia parecía improbable tras su franco rompimiento con Marvel Studios tras la salida de Patty Jenkins de la dirección de Thor: Un mundo oscuro. Sin embargo, el director neozelandés estaba convencido de que la mejor forma de elevar lo hecho por Ragnarok sería haciendo algo completamente inesperado como traer de vuelta a la actriz, lo que al igual que Thor, implicó una serie de cambios drásticos a la figura de Jane Foster. “Su personaje en esas primeras películas no era la versión más emocionante de un personaje femenino”, aseguró el cineasta . “Sólo tenía que hablar con ella sobre el hecho de que quería cambiar ese personaje, al igual que habíamos cambiado el de Thor, y darle un poco más de licencia para ser aventurera y divertida, porque Natalie es una persona muy divertida”. Su apuesta funcionó a tal grado que la actriz no ha vacilado en describir al realizador de “brillante”.
La noticia dejó en shock a las audiencias cuando fue anunciada durante la Comic-Con 2019, casi tanto como impactó a Thor en los avances. Las sorpresas prometen continuar luego de que Waikiki declarara que “la mayoría de la gente asumirá que la historia de amor es entre Chris y Natalie. No puedo prometer que sucederá lo que la gente cree que va a pasar en esta película”.
Caso similar al de Christian Bale, todo un referente del cine de superhéroes tras su mítica encarnación de Batman y quien regresa a este tipo de adaptaciones para dar a un personaje trágico, atormentado y sumamente violento. Se trata de Gorr, habitante de un planeta sin nombre que se ha visto aquejado por los desastres naturales y la falta de recursos, y cuyos habitantes sólo sobreviven por la fe en que los dioses. Pero la ayuda divina no llega, Gorr pierde a los suyos y emprende una búsqueda de venganza contra estos seres, apoyado por la Necroespada, concebida por la unión del primer simbionte y un Celestial caído. Todo esto, bajo el nuevo mote de el carnicero de los dioses.
Regresos y ¿despedidas?
El presidente de Marvel Studios, Kevin Feige, ha reiterado hasta el cansancio que, a pesar de la fidelidad de las historias, las adaptaciones cinematográficas siempre enfrentarán dilemas inexistentes para el cómic. Tal es el caso de la longevidad: los héroes impresos son eternos, mas no así los actores que les dan vida. Por esto mismo, hace tiempo que el estudio comenzó su renovación con nuevas adiciones como Doctor Strange, Capitana Marvel y Black Panther, pero también con la búsqueda de sucesores de los Vengadores originales. Capitán América, Black Widow y Hawkeye ya encontraron a los suyos; los de Iron Man y Hulk no tardan en llegar; pero ¿qué hay de Thor?
Es un hecho Natalie Portman cuenta con el talento, el carisma y la popularidad para convertirse en una piedra angular de la franquicia marvelita. También que a todos nos emociona su vuelta como Thor. Sin embargo, es imposible negar que el Dios del trueno interpretado por Chris Hemsworth tardó tanto en encontrar el rumbo, que ahora que finalmente lo ha hecho y de un modo tan brillante, todos queremos más del personaje. A esto se suma el factor nostalgia al tratarse del único elemento del equipo original con posibilidades de expansión en el terreno individual. Su partida marcaría el fin definitivo de una era.
A esto sumemos que el destino de los dioses es cruel y más de aquellos que cambian la arrogancia divina por valores humanos como el amor y el sacrificio. Loki lo padeció en carne propia y ahora podría ser el turno de Thor. Al menos así lo temen muchos aficionados, quienes no han sido indiferentes al hecho de que la narración de Korg en los primeros instantes de los avances está en pasado, lo que para algunos sugiere el deceso del héroe. Las puertas del Valhalla esperan entreabiertas, al igual que los cada vez más fervientes aficionados de un guerrero que luego de mucho batallar, finalmente ha encontrado todo su potencial.
El estreno de Thor: Amor y trueno será el 7 de julio de 2022 en las pantallas mexicanas.