Pensar en la traducción de este problema al idioma deportivo, es pensar directamente en el futbol profesional, una de las aristas que más se ha visto afectada por la mala relación entre ambas naciones… Y no solo en la actualidad.
“La historia de la rivalidad futbolística entre Ucrania y Rusia no comenzó tras la caída de la URSS, y podríamos decir sin temor a equivocarnos que, desde principios de la década de 1990, hemos vivido el epílogo de esta rivalidad, ya que la mayoría de los capítulos más importantes de esta historia de décadas se escribieron cuando Ucrania formaba parte de la Unión Soviética. Los seis principales clubes rusos y ucranianos disputaron más de 1800 partidos de futbol entre sí…”, se lee en la introducción del ensayo Forbbiden match: Russia vs. Ukraine , un texto publicado por el Institute of New Europe, escrito por Aleksander Olech y Mieszko Rajkiewicz.
Con un antecedente tan rico, aunado a los problemas más recientes entre estos estados, es fácil anticipar que, en cada oportunidad posible, el enfrenamiento deportivo siempre cuenta con tintes políticos.
Футбол — это быть с командой не только во время побед 🤜🤛 pic.twitter.com/ZtqEtPVtg4
— Сборная России (@TeamRussia) February 21, 2022