Acabas de lanzar un sencillo llamado “Se me olvidó” con Rels B. Cuéntanos sobre este lanzamiento.
Rels y yo teníamos ya varios años hablando pero nos perdimos la comunicación un buen tiempo. Luego nos saludamos en un post y comenzamos a platicar de nuevo y quedamos de vernos. Estuvimos cuatro o cinco días en CDMX y fuimos al estudio, a cenar, a platicar, a convivir más que a grabar. No sabíamos si íbamos a salir con una canción o o porque no teníamos nada escrito ni elegido. Pero terminó creándose “Se me olvidó”.
¿Cómo se fue construyendo la canción?
Comenzaron Jayrick y el equipo de Rels a meter ruido. Entre todos un poco decidieron el sonido. Queríamos hacer algo diferente y por eso metimos bolero. No porque no exista sino porque hace tiempo nadie sacaba un bolero con rap. Decidimos darle por esa línea: una guitarra de cuerdas de plástico con sonido de bolero. Rels hizo un coro atractivo, yo metí un puente. Él metió una voz abajo, y todo empezó a funcionar. Cuando lo tuvimos en preview dijimos “hit”.
En este sencillo metes bolero, en tu colaboración con Christian Nodal metes otros sonidos poco comunes en el rap y con Nanpa Básico y Charles Ans también tienes matices latinos que no son nada urbanos. Ahorita los géneros urbanos están pasando por esta clase de fusiones, pero al mismo tiempo no dejan de ser géneros súper puristas. ¿Cómo ha sido esta experiencia para ti?
Después de tantos años de rapear y de estar en un montón de escenarios, conviviendo con tanta gente, tu mente te lleva a otro nivel en el que dices que ya no debes de demostrarle nada a nadie sino disfrutar tú, siempre y cuando sea música del corazón. Entonces comienzas a experimentar con cosas más fuertes, sonidos y artistas diferentes. Tienes que subir de nivel en cuanto a tu mente, tus letras, tu esfuerzo. Muchos lo aceptan, muchos no, pero seguimos, y las canciones funcionan genial, tanto en los músicos jóvenes que apenas vienen empujando como en los que ya están. Creo que la música ahora está buscando un mensaje más positivo. Se ha acabado lo negativo. Se ha acabado también el hablar de las chicas como un objeto. Me gusta ser parte de esa generación que habla de otras cosas, de poder expresar una canción linda y que no pierdas tu esencia. Sigo igual de respetado en la calle, sin importar si canto "Se me olvidó” u otras de mi disco de puro rap. La persona sigue siendo la misma y la gente está valorando a las personas por lo que son y por lo que transmiten, no por el sonido de un beat.
Este año has sacado muchísimas colaboraciones y material propio, y da la impresión de que estás en un muy buen lugar a nivel creativo. ¿Tú cómo sientes esta etapa de tu carrera?
Me siento pleno. Grabé con Charles y Nanpa lo que quería grabar, me animé a hacer un dembow, grabé “Botella tras botella”, “Se me olvidó”, ahora traigo el disco más rapero del año por salir… todo es un proceso y me adapto a la situación. De niño era como: “crecí con nada, no me voy a quejar de nada, sólo me voy a esforzar”, y eso es lo que pasa en mi música. Estoy en plenitud, tengo a toda mi familia de cerca, a mis amigos verdaderos, y se siente bonito llegar al éxito no tan grande para poderlo disfrutar. Me encanta la edad en la que llego porque tengo la madurez para dejar mi cuerpo limpio de cosas que no son buenas y disfrutar otras cosas que se habían perdido. El deporte en exceso también me gusta, boxear, correr, y lo estoy disfrutando mucho.
Acabas de cumplir 27 y ya eres uno de los mayores referentes del rap en México.
Creo que hay muchos mayores, pero sí me considero de los que más trabajan. Me considero en el top, fuerte , con un equipo sólido, tranquilo con lo que está pasando y me esfuerzo cada día más. No doy por sentado nada, no doy por ganada ninguna pelea y siempre salgo a querer más. Estoy disfrutándolo, rapeándolo. En los shows cada vez se da más que hablo con la gente, con los seguidores, con mis amigos, con mi familia, que son los que me apoyan. Eso ha mantenido mi base y no se me ha volado la cabeza. Si lo estoy disfrutando –¿para qué miento?–, pero desde otro ángulo, uno muy positivo, muy saludable, desde un ángulo muy unido.
Hace ratito decías que creciste sin nada, pero ahora lo tienes todo. ¿Cómo es asimilar un cambio tan drástico?
Cuando empezó a cambiar todo decíamos: “¿Quién jugó Jumanji?”, pero no sé, cuando trabajas de cero a cien y no te llega de golpe nada –porque no nos llegó de esa manera como a otros proyectos––– nosotros llevábamos diez años de trabajo duro y no es secreto para nadie que “Botella” destapó muchas cosas que no habían pasado. Ahora tengo más atención y se ve reflejado en el tema de “Se me olvidó”. Es bonito disfrutar todos los procesos y eso fue lo que hizo que no me volviera loco. Podrían pensar que tengo todo pero me falta mucho. Lo que sí es que ya tenemos mucho más que cuando empezamos, y no hablo nada más de dinero, sino de prestigio, de plusvalía, de respeto, y eso es bonito. También la estabilidad económica que le puedes brindar a tu familia y dejar de ser el marihuanero, el de barrio bajo o el que estaba descarriado es como una medalla de oro que te llevas a tu casa y la cargas de por vida. Eso nunca se te olvida, y es lo más disfrutable del proceso: darle una lección a tu pasado y hacerle saber que no estabas equivocado.
¿En qué momento te diste cuenta de que tu vida había cambiado?
Cuando podíamos comprar muchos waffles en Costco, sin límite; no te creas. Cuando mi mamá estaba bien, cuando la familia dejó de batallar, antes era muy difícil que vinieran a verme por los vuelos desde Canadá, y ahora se volvió sencillo. Ese fue mi medidor de vida, el ver que ahora mi familia está a un click y no a dieciséis conciertos de esfuerzo. Ahí comenzó a cambiar todo.
Algo que me parece admirable de ti es que toda tu carrera te has mantenido independiente, cuando seguro se te han acercado todas las disqueras importantes. Esto te da más libertad pero al mismo tiempo hace que tu camino sea más pesado. ¿Cómo lo has vivido?
Creo que las disqueras suman a los proyectos. Hasta la fecha agradezco mucho la atención y tener los ojos de las disqueras grandes puestos en mí, y lo digo con mucho respeto porque es increíble cómo manejan a sus artistas, pero simplemente fue un caso especial el mío y lo quiero dejar así. Tal vez algunos piensen que estoy equivocado, tal vez algún día haga una alianza, pero Rich Vagos (su disquera) siempre será independiente. Tal vez se puedan firmar algunas cosas de distribución o cosas que pasan para que la música siga avanzando, pero el sello como tal siempre será independiente. Tratamos de que sea así porque creemos tanto en nosotros que nos consideramos un caso especial. Seguro hay más casos similares funcionando y teniendo gran éxito, pero cada quién disfruta la película a su manera y sólo vamos a vivir con un boleto y es el de ida, el tiempo ya no regresa. Yo vivo bien, mis amigos viven bien ahora, fue un proceso largo y lento, y por lo mismo decidimos mantenerlo así. Nos costó mucho trabajo y peleamos un tiempo más para llevar las cosas a otro nivel, pero está pasando.