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Refuerzos y estrellas juveniles: a quiénes seguir en el futbol de Tokio 2020

Un recuento de aquellos refuerzos nacidos antes del 1 de enero de 1997, así como las figuras juveniles a seguir para el torneo varonil de futbol en los Juegos Olímpicos.
lun 05 julio 2021 08:50 AM
Iceland v Mexico
El guardameta mexicano, Memo Ochoa, clave en alcanzar el oro en Londres 2012.

Antes de soñar con participar en una Copa del Mundo, con representar a su país en el torneo de futbol más importante del planeta, los jugadores juveniles naturalmente se imaginan viajando con la selección olímpica, generan esa ilusión de escuchar el himno de sus países con la bandera izada en lo más alto del asta y, por supuesto, una medalla dorada colgando de sus cuellos.

Pensar en los nombres destacados, en los jugadores que disputaron los Juegos Olímpicos y después consagraron su nombre en el futbol a nivel élite, es pensar en Ronaldinho (Sydney 2000), en Iván Zamorano (Sydney 2000), en Rivaldo, Ronaldo y Roberto Carlos (Atlanta 1996), en Hernán Crespo, Diego Pablo Simeone y Javier Zanetti (Atlanta 1996) o en Pirlo, De Rossi y Carlos Tévez (Atenas 2004). Muchos son los nombres de futbolistas que dieron el brinco a los sitios estelares después de disputar la justa olímpica, y rumbo a Tokio 2020, los rosters ya presentan a figuras tanto juveniles como consagradas, lista que a continuación repasamos.

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Refuerzos, experiencia para guiar

La regla para el futbol olímpico dicta una fecha límite de nacimiento que, para esta edición, es el 1 de enero de 1997; los jugadores nacidos después de esa fecha califican para participar, pero todas las selecciones tienen la posibilidad de llevar a tres refuerzos de mayor edad. Las listas definitivas se enviaron a la FIFA el 30 de junio y entre los nombres confirmados para jugar el papel de los experimentados, encontramos figuras de talla internacional.

Dani Alves

Con 41 títulos ganados en su trayectoria, este brasileño es uno de los jugadores más exitosos en la historia del futbol. A donde fue a jugar, levantó un título, y eso no cualquiera lo presume. Alves, actual jugador del Sao Paulo, reforzará a la selección brasileña en Tokio con 38 años cumplidos, e intentará aportar su experiencia para sostener la medalla de oro, ya que Brasil es el vigente campeón olímpico.

Marco Asensio

Uno de los futbolistas españoles con mayor proyección de los últimos años. Este mediocampista ofensivo del Real Madrid tiene apenas 25 años, cuenta con un poco más de experiencia que la generación olímpica de España y, con ese futbol inteligente que le caracteriza en la diestra, apoyará la creación y creatividad de su país. Junto a él, Dani Ceballos también reforzará a la Furia Roja en Japón.

Luis Romo

Parte fundamental del Cruz Azul que rompió la racha negativa y levantó el título número 9 de su historia. Este mediocampista mexicano resultará importante para el equilibrio del Tri de Jaime Lozano. Romo, de 26 años, encontrará en Tokio la vitrina ideal para buscar alguna oportunidad en el futbol europeo y, al ser uno de los mejores creadores de oportunidades y pases de peligro en el más reciente torneo de la Liga MX, se le augura una participación destacada en el torneo olímpico.

Guillermo Ochoa

Uno de los mejores porteros que México ha tenido en la historia. El americanista tiene ya 35 años de edad, y con una trayectoria vasta en distintos países del mundo, pretende emular lo que logró José de Jesús Corona en el Tri olímpico de Londres 2012: aportar la seguridad en el arco y esa experiencia que bien puede servir como aliciente para motivar al equipo mexicano. Con Ochoa en el arco, la seguridad defensiva se eleva, y eso siempre hará jugar con mayor solvencia a cualquier equipo.

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André-Pierre Gignac

El delantero de Tigres es un viejo conocido del futbol mexicano, y los enfrentará en partido correspondiente al Grupo A. Después de múltiples bajas imprevistas en la selección francesa, debido a la negativa de muchos de los clubes en los que militan sus estrellas, se confirmó que el atacante (de 35 años de edad) será uno de los refuerzos galos, y junto a él estará también Florian Thauvin (28 años), otro elemento de los Tigres de la Autónoma de Nuevo León. Ambos son atacantes, uno de los sectores del campo en el que esta selección olímpica francesa acumula mayor poderío.

Hiroki Sakai

El experimentado central del Olympique de Marsella reforzará a la brillante generación olímpica japonesa. Con 31 años cumplidos, y más de 8 años jugando en Europa, Sakai hará de la zaga nipona un muro, a lado de Maya Yoshida, otro de los refuerzos de los locales y quien también juega en la central. De acuerdo con las voces especializadas, Japón es uno de los equipos olímpicos favoritos al oro, por la combinación de experiencia y talento juvenil, además de la ventaja de ser locales, por supuesto.

Emergentes, talento juvenil

Abundan en las listas olímpicas esos nombres que en Tokio comenzaremos a escuchar con mayor constancia y que seguramente poblarán la élite del futbol mundial poco tiempo después. Claro que en cada país hay talento que subrayar, pero el siguiente top 5 aglomera a los juveniles con mayor proyección, basados en sus números y las capacidades demostradas hasta ahora.

Takefusa Kubo (Japón)

La estrella de los Samuráis para esta competencia. Kubo está llamado a ser el nuevo referente futbolístico de Japón. El juvenil cuenta con solo 20 años de edad, juega en la mediacancha y su carta pertenece al Real Madrid, aunque ya ha pasado por las filas del Villarreal, Mallorca y Getafe. Kubo, el juvenil distinto, podría ser el diferenciador que catapulte a Japón a los primeros lugares del certamen.

Eduardo Camavinga (Francia)

Con el Rennes de la Ligue 1 francesa, este juvenil se consagró con grandes actuaciones y finalizó en la sexta posición de la más reciente edición. Es mediocampista, está rankeado como el #2 en la lista anual de Goal de los talentos futbolísticos a seguir. Camavinga ya ha sido llamado a la selección mayor de Francia, y debutó con el representativo francés a los 17 años.

La especulación alrededor de Camavinga va más allá de los Juegos Olímpicos, y es que se espera que alguno de los mejores clubes del mundo se haga con sus servicios en este mercado veraniego.

Takehiro Tomiyasu (Japón)

Otro de los niños prodigio de esta generación de futbolistas japoneses. Tomiyasu, de 22 años de edad, se desempeña como defensa en el Bologna italiano, pero los rumores de su traspaso al Tottenham inglés cada vez son más fuertes. Desde el 2019 juega en el futbol europeo y su calidad defensiva lo ha mantenido como una prioridad entre varios clubes de Italia. Tokio 2020 podría significar el parteaguas necesario para que su carrera despegue por completo.

Diego Lainez (México)

Paulatinamente Lainez se ha convertido en un revulsivo de peligro para el Real Betis Balompié, su club desde el 2019. El surgido de las Águilas del América ha sumado volumen corporal y eso, aunado a la velocidad y desequilibrio que siempre ha caracterizado su estilo de juego, lo proyectan con muy buen augurio de cara a sus próximos años como futbolista profesional. Lainez Leyva tiene 21 años, ya tiene experiencia con la selección mayor y, en Tokio, encontrará las condiciones ideales para volver a llevar a México a lo más alto del deporte olímpico y, por qué no, ganarse un lugar en los intereses de clubes con mayor relevancia. Diego es, quizá, el futbolista juvenil que más emociona a los aficionados mexicanos.

Unai Simón (España)

Un guardameta de corte clásico, con actuaciones destacadas que incluso lo tienen como el arquero titular de España en la Eurocopa, en donde fue el héroe de la tanda de penales ante Suiza. Este portero de 24 años de edad milita en el Athletic de Bilbao y se perfila para continuar el legado de grandes guardametas españoles que han surgido en los últimos años. Simón, de 1.90 m de estatura, podría resultar clave para las aspiraciones olímpicas de España, el último país europeo que consiguió la medalla de oro (Barcelona 1992).

El torneo de futbol varonil en Tokio comienza el 22 de julio y finalizará el 7 de agosto. Los grupos van del A al D. En el primero, se encuentran Japón, México, Sudáfrica y Francia. En el sector B, están Nueva Zelanda, Corea del Sur, Rumania y Honduras. En el grupo C están Egipto, Australia, Argentina y España. Por último, el grupo D se conforma por Alemania, Brasil, Costa de Marfil y Arabia Saudita.

Para esta edición olímpica, cada país puede viajar con un roster de 22 jugadores, pero solo 18 podrán ser registrados para cada partido, lo que deja un margen de maniobra que anteriormente no tenían los entrenadores olímpicos.

Las últimas cuatro ediciones de este torneo fueron conquistadas por países del continente americano. Argentina ganó dos medallas de oro consecutivas, en Atenas 2004 y Beijing 2008, después México se alzó con la presea dorada en Londres 2012 y Brasil hizo lo propio en Rio 2016. Las tendencias en el mundo deportivo suelen romperse y, tras un proceso olímpico tan atípico como en el que se experimentó recientemente, el pronóstico es más reservado que nunca. El fuego olímpico iluminará las canchas en Japón y, como siempre, el futbol tendrá al mundo a la expectativa del espectáculo.

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