De simples caricaturas, nada. La animación es tan compleja como cualquier película, corto o serie en life action y, en ocasiones, un poco más. La animación es un trabajo que puede llevar años, como en el caso de Ana y Bruno , de Carlos Carrera.
El filme tardó 13 años en desarrollarse y tuvo un costo estimado de 100 millones de pesos, lo cual ejemplifica la titánica labor de la animación, pero también pone de ejemplo sino las narrativas que se pueden encontrar en este cine, más allá del entretenimiento, lo didáctico y la acción.
Estrenada inicialmente en 694 cines, el filme del ganador de la Palma de Oro de Cannes por El Héroe abordaba la salud mental y el duelo a través de una pequeña niña y una alucinación.
Así como Ana y Bruno, estas cintas hacen de la animación un excelente lenguaje para temas que van desde la resignación hasta la migración.