Sin embargo, siete meses después de su lanzamiento, Quibi echa el cierre definitivo, algo que ha comunicado en una "carta abierta" a sus "empleados, inversores y socios que creyeron en Quibi y lo hicieron posible".
"Empezamos con la idea de crear la siguiente generación de contadores de historias y gracias a vosotros fuimos capaces de crear y ofrecer la mejor versión de lo que imaginamos que Quibi sería", comienza el comunicado. "Por ello, es muy duro tener que anunciar hoy que cerramos el negocio y estamos viendo la manera de vender tanto su contenido como sus activos tecnológicos".
"Quibi -continúa- era una gran idea y no había nadie que quisiera que esto saliera adelante más que nosotros. Nuestro fracaso no ha sido por no haberlo intentado; hemos probado y consumido todas las opciones posibles (para evitar el cierre)".
Los responsables de la plataforma reconocen en la carta que "a pesar de los intentos", Quibi "no ha tenido éxito", algo que achacan a dos posibles razones: Por un lado, que la idea no fuera "suficientemente fuerte para justificar un servicio de streaming independiente" y, por otro, no haber aparecido en el "momento oportuno".