El evento, en el que suelen participar unas 30,000 personas, se había celebrado cada año sin falta desde 1897, convirtiéndose en la maratón anual más antigua del mundo.
En 2013 la carrera fue el objetivo de un atentado con la explosión de dos bombas caseras cerca de la línea de meta, horas después de que hubieran pasado los ganadores. Las explosiones causaron tres muertos y más de 250 heridos, pero un año después la prueba volvió a celebrarse.
Los otros dos grandes maratones programados en Estados Unidos para finales de este año -la Maratón de Chicago del 11 de octubre y la Maratón de Nueva York del 1 de noviembre- siguen por ahora en el calendario.
Una edición virtual
Como alternativa a la cancelación, los organizadores propusieron una maratón virtual en la que podrá participar todo atleta que lo desee entre el 7 y el 14 de septiembre.
En el lugar en el que se encuentren, los corredores tendrán que completar la distancia de 42 kilómetros en seis horas y proporcionar una prueba de tiempo, según explicó la Asociación Atlética de Boston (BAA) en un comunicado.
"Todos los atletas que completen la carrera virtual recibirán un programa oficial del Maratón de Boston, una camiseta de participante, una medalla y un peto de corredor", dijo la BAA, que entre el 7 y el 14 de septiembre también organizará una serie de eventos relacionados con la maratón, como charlas y entrevistas.
"Nuestra prioridad principal sigue siendo salvaguardar la salud de la comunidad, así como la de nuestro personal, participantes, voluntarios, espectadores y simpatizantes", dijo el director ejecutivo de la BAA, Tom Grilk.