Cómo ha evolucionado en 50 años la manera de tener sexo

Cuando el periodista Gay Talese (autor del memorable perfil Frank Sinatra tiene un resfriado) conoció a Gerald Foos no quedó cautivado por su discurso sobre la sexualidad humana o sobre su método para espiar huéspedes en su motel de Colorado. En realidad, lo que llamó su atención fue su obsesión por no 'invadir' la intimidad de los observados para así no transformar sus actitudes y poder observar, con la mayor cercanía a la realidad, sus comportamientos sexuales.

Esta obsesión se convirtió en el primer hilo conductor de Talese para investigar, por tres décadas, el diario de Foos en torno a su voyeurismo y así escribir su libro El motel Voyeur (que próximamemte será llevado al cine por el director de la última James Bond, Sam Mendes) en el cual no sólo muestra las experiencias que el voyeurista tuvo en torno a distintas maneras de meterse a la cama, sino también su afán por no intervenir, mismo que lo lleva a callarse un asesinato.

Pero uno de los hechos más importantes que registra el libro son los momentos en los que Foos descubre cómo la sexualidad de las personas va cambiando a lo largo del tiempo y de acuerdo a distintos cambios en la sociedad. Aquí te presentamos cinco momentos en los que la sexualidad occidental fue transformada de acuerdo a las 'observaciones' de un voyeurista.

null1. EL SEXO INTERRACIAL
Cuenta Gerald Foos en su diario que, al principio, cuando una pareja en la que un hombre negro llegaba con una mujer blanca a la ventanilla, normalmente la mujer era quien pedía el cuarto mientras el hombre negro rondaba por ahí, de manera discreta, tratando de evitar que se les viera juntos. Y cuando una mujer negra llegaba con un hombre blanco, eso no pasaba. Pero, justo con el movimiento de Martin Luther King que reivindicaba la lucha racial todo cambió y fue común empezar a ver, sin pena alguna, a parejas interraciales en el Motel. La manera en la que tenían sexo, cuenta Foos, era peculiar puesto que por primera vez eran libres para hacerlo sin prejuicio y durante una época su motel se llenó sólo de parejas que no tenían conflictos raciales.

2. LA CÁMARA POLAROID
El uso y la masificación de las cámaras Polaroid automáticas (como el modelo Polaroid Automatic 350, en la década de los 60) transformó la intimidad en el sexo. Cuenta Foos que tras la popularidad de las cámaras Polaroid y las Super 8 en la vida cotidiana, las personas empezaron a deshinibirse y a llevar sus cámaras hasta el cuarto del motel. Ahí, el voyeurista comenzó a mirar cómo la gente ya se filmaba o se fotografiaba a sí misma en distintas poses, dando un paso a ser mirones de su propia intimidad. Con ese cambio, la gente abrió las puertas a los videos amateurs y el sexting actual. Las parejas comenzaron a desnudarse unas frente a otras y ya no en el baño... bendito el señor.

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3. LOS HIPPIES
Con la llegada del amor libre y la paz, Gerald observó cómo su motel comenzaba a llenarse ya no de parejas, sino de grupos. Muchas mujeres y pocos hombres o viceversa (o la combinación que se les ocurra) comenzaron a experimentar la sexualidad a nivel grupal, provocando importantes transformaciones de la percepción del cuerpo.

null4. LA PÍLDORA
Con la apertura y el acceso a nuevos métodos anticonceptivos, en los 70, Foos notó cómo la gente acudía al motel ahora de manera más casual. Ya no se trataba sólo de una noche apasionada y bien organizada sino de jornadas caóticas contra la cabecera de la cama.
A partir de aquí, Foos señala que todo se ha abierto y ahora todos van contra todos y sin mucho límite de por medio, hasta la llegada del SIDA a nivel global.

5. GARGANTA PROFUNDA = SEXO ORAL
La llegada, en 1972, de la película Garganta profunda transformó para siempre la relación entre parejas y el sexo oral. Cuenta nuestro voyeur que, tras el estreno, las parejas comenzaron a 'demandar' el sexo oral como un requisito de los encuentros de motel. Poco a poco, se fue haciendo cotidiano como experiencia y terminó, rapidamente, por instaurarse en las prácticas comunes de hoy.