Descubre lo que hay detrás de los efectos especiales en el cine
Nació en una pequeña granja al sur de Inglaterra y se educó viendo películas como El planeta de los simios (Franklin Schaffner, 1968), Tiburón (Steven Spielberg, 1975), Close Encounters of the Thrid Kind (Spielberg, 1977) o Eraserhead (David Lynch, 1977). "No había manera alguna de que trabajara en la industria del cine", recuerda Guy Hendrix Dyas, actual diseñador de producción nominado en dos ocasiones al Oscar, "así que me dediqué al diseño industrial".
Así, comenzó diseñando discmans y walkmans para Sony y no fue hasta que hizo una exposición de sus dibujos y objetos mecánicos privados que alguien de Industrial Light and Magic (ILM) –una empresa de efectos especiales fundada por el mismísimo George Lucas– vió su potencial para el cine.
"Me ofrecieron un trabajo en ILM durante tres años y se convirtió en mi escuela de cine", relata nostálgico. Su primer trabajo como artista conceptual y de storyboard fue para Twister (Jan de Bont, 1996), en los albores de la revolución del CGI y los efectos por computadora revolucionarios. "Tras ver Jurassic Park, todos estábamos emocionados por ver cómo sería crear animales, agua o efectos de clima con estos nuevos sistemas", nos cuenta.
Así, tras estos tres años, Guy Hendrix decidió perseguir el sueño de ser diseñador de producción mudándose a Los Angeles para lograrlo a principios de los 2000s. Ahora, su trabajo consiste a crear mundos enteros y manejar cada aspecto del arte de una producción. Obviamente, eso requiere una imaginación prodigiosa en el caso de películas no históricas o que no ocurren en la actualidad.
Y con esa imaginación precisamente logró su primera nominación al Oscar en 2011 con El origen junto al director Christopher Nolan . "Christopher y yo tenemos la misma edad y una filosofía muy similar respecto a hacer películas: hay que filmar lo máximo real posible y complementarlo con efectos digitales", cuenta sobre el proceso. "Nos pasamos meses trabajando en su casa e inventando sets locos en los que los actores giraban y se valían de ilusiones como espejos, utilizamos muchas técnicas propias del teatro".
Su último trabajo ha sido en la epopeya espacial Passengers (Morten Tyldum, 2016) y asegura sentirse muy orgulloso de ello, no por nada el filme lo devolvió al Teatro Kodak este año. "Para las películas de ciencia ficción me inspiro mucho en la naturaleza. Por ejemplo, para la nave espacial me fijé en las semillas de los plátanos, porque son como pequeños helicópteros, y me basé en ellas en gran medida", describe sobre su proceso creativo.
Tras estos Oscars de final "confuso pero bastante bonito", Guy Hendrix se encuentra a la espera de nuevos proyectos y leyendo todos los guiones que puede. Sin embargo, hay un director con el que ansía trabajar: "Espero que algún día me llame Guillermo Del Toro, sería fantástico", confiesa entre risas nerviosas.
Passengers sale a la venta en Blu-ray y DVD el próximo 24 de marzo.