Es normal que cualquier mujer se acompleje por sus defectos físicos o emocionales. La búsqueda de la perfección y ser “la mujer ideal” para el hombre que les gusta resulta ser imperante y por ello desechan cualquier virtud o atractivo que tienen.
Sin embargo, lo que ellas no saben, es que a nosotros son precisamente esas peculiaridades lo que más nos atrae. Con base en esto, enlistamos 5 defectos femeninos que a nosotros nos vuelven locos.
1. Timidez
Esta condición es temida por muchas mujeres, ya que se imaginan de ancianas, solas y con gatos, por lo que constantemente intentan lanzarse y ser diferentes. Lo que no saben, es los hombres sentimos ternura al momento en que se sonrojan y ponen nerviosas cuando nos acercamos o hacemos algo por ellas pero además, prenden ese instinto de querer protegerlas y de saber que la atracción es recíproca.
2. Curvas
Aquí volvemos al mismo punto que al anterior: la mayoría de las mujeres piensa que el estar delgada es sinónimo de perfección, y aunque varias chicas que son delgadas son extremadamente atractivas, las que tiene curvas lo son -para la mayoría de los hombres- todavía más no solo por el hecho de que está más apegado a la realidad, sino por razones biológicas, ya que una mujer con caderas -o curvas- es sinónimo de fertilidad.
3. Pelo desarreglado
El hecho de que una mujer tenga un peinado -o pelo- perfecto no quiere decir que nos haga sentir más atraídos hacia ellas. En realidad, el verlas con un look salvaje o un tanto desaliñado nos resulta ideal pues envía el mensaje de ser relajada, tranquila y que no está al pendiente todo el tiempo de los detalles.
4. Torpeza
No, no quiere decir que nos gusta que nos tire el café en el pantalón o que se tropiece en cada momento. En realidad hablamos de esas pequeñas fallas o intentos por hacerse ver experta pero en realidad no lo es. Sutil, bromas que no son graciosas, o cuando se equivocan al hablar. Eso es lo que más nos vuelve locos.
5. Pecas y lunares
Es cierto que a la mayoría de las mujeres no les gusta tener pecas. Sin embargo cierto es también que cuando no tienen maquillaje y vemos todas y cada una de sus pequeñas manchas en la piel nos resulta simplemente irresistible. Aunado a esto están los lunares. El hecho de descubrirlos es un aliciente para encontrar hasta el más mínimo “defecto” en ellas.