Entre irse y quedarse: Messi pone a temblar al Barcelona
Un año sin títulos, una final perdida de Copa del Mundo, tensiones con su entrenador Luis Enrique y para terminar Cristiano Ronaldo Balón de Oro delante de él: Lionel Messi no está contento y tras algunas palabras suyas que desorientan, tiembla todo el Barcelona.
Para los aficionados y dirigentes catalanes, la salida del jugador es imposible, está prohibida, aunque Messi augura que muchas cosas pueden pasar en su futuro, una de ellas, dejar a los culé.
"Siempre dije que me gustaría finalizar mi carrera en el Barcelona y luego en Newell's, pero no sé dónde estaré el año que viene. Como recién dijo Cristiano (Ronaldo), el futbol da muchas vueltas y puede pasar cualquier cosa", dijo Messi tras la ceremonia del Balón de Oro que perdió frente a Cristiano Ronaldo.
En momentos en los que la prensa española asegura que su relación con el técnico Luis Enrique es conflictiva y que el astro argentino estaría estudiando la posibilidad de abandonar el Barcelona, su equipo de toda la vida y con el que ha ganado todos los títulos posibles, las palabras de Messi volvieron abrir las dudas sobre su futuro.
Aunque el domingo ya tuvo que desmentir que se quisiera ir, tras la victoria contra el Atlético de Madrid (3-1) y calificó de "mentiras" las informaciones de algunos medios que hablaban de negociaciones de su padre con Chelsea o Manchester City.
"Diga lo que diga se le da la vuelta, por eso muchas veces no hablo. No estoy pensando en irme ni mucho menos", señaló.
Nadie sabe a qué juega exactamente Messi, pero cualquier gesto suyo levanta las más locas interpretaciones, como cuando decidió la semana pasada "seguir" la cuenta del Chelsea en Instagram o al designar a José Mourinho, técnico del equipo londinense, como tercer mejor entrenador del año, detrás de Alejandro Sabella (extécnico de Argentina) y Pep Guardiola (Bayern Múnich).
Estas dudas tienen que ver probablemente con su actual estado de ánimo en un duro 2014 en el plano personal, entre lesiones y problemas con la hacienda pública española, frustrante deportivamente, sin ningún título y la final perdida del Mundial.
Sin olvidar el contexto actualmente delicado en Barcelona, donde sus relaciones con Luis Enrique son, según la prensa catalana, tormentosas cuando no glaciales, lo que según la prensa española abonaría también a la salida del argentino.
Hace una semana fue suplente en el encuentro ante la Real Sociedad en el que perdieronn 1-0. Después Messi faltó al entrenamiento abierto al público de las fechas de Reyes Magos, alegando una gastroenteritis sospechosa.
Para luego desmentir ante la prensa que hubiera pedido el cese de Luis Enrique.
Impasible, Messi recibió los elgios de su entrenador el lunes en Zúrich, en su mensaje grabado antes de que se supiera que el Balón de Oro fue para Cristiano Ronaldo.
Este miércoles Luis Enrique dijo que el club catalán no se plantea un futuro sin Lionel Messi.