¿Sabías que la primera selfie fue tomada en 1914?
Si le preguntamos a cualquiera cuál fue el momento de explosión de las selfies, posiblemente todo el mundo coincida en que el año 2012 es una fecha bastante acertada; sobre todo si tenemos en cuenta que fue entonces cuando la revista Time la eligió palabra del año. Pero si preguntamos sobre el origen de éstas, la discusión se abrirá un poco más. Muchos hablarán de webcams, celulares y redes sociales. Otros, de cámaras digitales y adolescentes dándoles la vuelta e intentando acertar, o sacándose fotos de sí mismos frente al espejo con la luz del flash como sello de estilo de una época muy concreta, por allá de mediados de los 2000.
Nosotros vamos a sumarnos al segundo grupo, al que cree que el autoretrato fotográfico –hoy selfie– ha explotado gracias al avance y la democratización de la tecnología, pero que existe desde hace mucho, pero mucho tiempo.
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A principios del siglo XX la fotografía era algo al alcance de muy pocos. Uno de esos pocos fue la adolescente duquesa Anastasia Nikoláyevna de Rusia, considerada por este segundo grupo la precursora de todas las selfies. En 1914, la joven de 13 años colocó su Kodak Brownie frente al espejo de su cuarto y se inmortalizó de la misma forma que un siglo después todo el mundo lo haría. Aunque la razón, aquella vez, fue algo más triste: una Europa a punto de estallar y un mensaje para una amiga a la que no sabía si volvería a ver: "He tomado esta foto de mí misma mirándome al espejo. Fue difícil, ya que mis manos estaban temblando".
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