Así es el último Volkswagen Beetle del mundo
Caminar a un lado de la legendaria nave 28 en la planta de Volkswagen en Puebla , México, remueve sentimientos sobre uno de los modelos más importantes en la historia mundial. En esa nave se produjo, en 2003, el último VW Sedán, y con ello, se dio cerrojazo a una era llena de romanticismo.
Los trabajadores que ensamblaron ese último “Vocho”, veían como se apagaban las luces de cada una de las islas conforme el chasis avanzaba en la línea de producción. Tras décadas de construirlo, el peculiar modelo no volvería a salir de la planta poblana o de ninguna otra en el planeta, por lo que sus sentimientos afloraron y comenzaron a llorar. Una fuerte despedida al “escarabajo” y el motivo por el que hoy se le conozca a ese lugar como “la nave de las lágrimas”.
Tan sólo unos años antes, en 1998, Volkswagen presentaba al Beetle, un modelo que rescataba los elementos más importantes de diseño del Sedán, y lo catapultaba a la modernidad.
El Beetle recibió la estafeta del legado del Sedán, y con la misma silueta, comenzó su andar en las carreteras del mundo. Para beneplácito de los trabajadores poblanos, la armadora alemana designó a la planta mexicana como uno de los sitios que producirían al ‘nuevo escarabajo’.
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Sin embargo, la marca ha vuelto a golpear a los corazones de los entusiastas de la silueta del “Vocho” y decidió culminar con la producción del Beetle. El mercado se mueve a las SUVs y el Beetle no puede competir ante el nuevo mercado.
De nueva cuenta, Puebla será la última planta que produzca ese modelo, y con una versión llamada Final Edition pondrán fin a una historia que nació desde la década de los 30 del siglo pasado.
La última edición del Beetle consta de 565 unidades, una cifra que celebra, a su vez, los 65 años que la armadora cumple en territorio mexicano, un doble homenaje que da mayor valor al vehículo.
Y si bien no es la versión más poderosa del Beetle, Final Edition tiene su encanto gracias a los detalles que nos recuerdan al sedán.
Cuenta con un motor 5 cilindros, 2.5 litros, que genera 170 caballos de fuerza, ligado a una transmisión tiptronic de 6 velocidades con tres modos de manejo. Como sellos característicos tiene un techo corredizo panorámico, emblema lateral de Wolfsburg, emblema trasero de Beetle y equipo de sonido Fender .
Tiene cuatro bolsas de aire, sistema ABS, ASR, ESC, HHC y detector de punto ciego. Sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 6.5 pulgadas, y cámara de visión trasera. Si se pensaba que por ser la edición final estaría llena de extras, es un error, pues la marca quiso honrar el espíritu del “ vocho ”, y es precisamente lo que busca al rescatar el color “reedbeige”, así como el “azul stonewash”, “negro profundo” y “blanco puro”.
Apenas salió el primer lote de esta edición de la planta poblana, lo manejamos rumbo a la Ciudad de México , para comprobar que se trata de una versión que emocionará a los entusiastas de la marca. Un manejo sencillo, sin falsas pretensiones y el alma de un vehículo que posicionó a la marca en el corazón de todo un país.
Sencillo, con un volante delgado que recuerda a aquel “vocho” con el cual aprendimos a manejar, el Final Edition es un homenaje merecido al vehículo que abrió las puertas de México a Volkswagen, y que hoy, a 65 años, le celebran.
Precio: 396,565 pesos (en otra alusión a su aniversario en México).