La historia del primer auto en el mundo que recibió una multa por alta velocidad
Es un hecho que siempre debemos ser conscientes de respetar las reglas de tránsito del lugar al que vamos y más si somos amantes del automovilismo y de la velocidad. Para eso, hay que buscar lugares especiales que tengan el ambiente de seguridad adecuado para dar rienda suelta a nuestra diversión.
Los límites de velocidad y el no respetarlos se ha dado desde que nació el automóvil y la mejor prueba de ello es este Arnold Benz Motor Carriage de 1896, que posiblemente se trata del primer auto que recibió una multa por ir a gran velocidad en aquel año en Londres, Inglaterra.
¿Qué significaba ir a gran velocidad en 1896?
Dos millas por hora… si, 2 mph, es decir, 3.2 km/h, algo muy familiar para los que vivimos en la CDMX al ser esa la máxima velocidad que podemos alcanzar en Periférico justo en horas pico. Fue el 28 de enero de 1896 cuando Walter Arnold fue sorprendido al momento de exceder dicho límite de velocidad cuando viajaba a 8 mph (12 km/h), por lo que el policía en bicicleta que lo vio, lo alcanzó y le escribió la multa correspondiente. Posteriormente, Arnold fue declarado culpable por ir a exceso de velocidad y pagar una costosa multa de un chelín inglés.
Las consecuencias de esta situación repercutieron en cosas buenas, ya que a partir de ese momento se comenzó a crear una conciencia del automóvil y el Reino Unido elevó el limite de velocidad a 14 mph, es decir, 22 km/h. Estas decisiones fueron celebrados por los pocos dueños de automóviles que existían en aquel entonces, siendo una carrera de Londres a Brighton el festejo -¿qué otra cosa más?- y denominándola la Carrera de la Emancipación, donde por supuesto que Arnold estuvo con su Benz Motor Carriage.
Este famoso auto estará presente en el Concurso de la Elegancia de Hampton Court Place en Inglaterra el próximo mes de septiembre.
