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El estilo de la Fórmula 1 a través de los años

El estilo que definió a cada una de estas leyendas de la F1 lo largo de sus carreras ha trascendido con ellos para convertirlos en íconos atemporales.
lun 24 octubre 2016 03:50 PM
Fórmula 1 - Ayrton Senna
Fórmula 1 - Ayrton Senna Reckless Style (Foto: Pascal Rondeau/Getty Images)

Juan Manuel Fangio - 1950

Quedar permanentemente paralizado del torso podría haber sido una limitación para cualquier otro piloto, pero no para Fangio, quien, además de poseer un carisma inigualable, gozaba de una fuerza y stamina únicas. O, en otras palabras, tenía lo necesario para brillar en una era en la que los automóviles no contaban con la misma tecnología y seguridad que en la actualidad, así que el talento del piloto jugaba un papel de vida o muerte. Su físico y su look desaliñado no cumplían los estándares típicos de un ladies man en los años dorados del estilo preppy. Su apodo “El Chueco”, que se ganó después de haber perdido el control de su Maserati, lo dice todo. Sin embargo, este argentino poseía un magnetismo con las mujeres que lo mantuvo siempre en buena compañía y le dio fama mundial, más allá de sus logros en la pista.

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Juan Manuel Fagio - F1
Juan Manuel Fagio

Jim Clark - 1960

Con la elegancia propia del temperamento británico, este piloto supo mantenerse al margen de la fama para triunfar a golpe de méritos. Aunque la excentricidad y la desenvoltura parezcan características intrínsecas de los pilotos, existen casos extraordinarios, como el del escocés James Clark. A pesar del éxito obtenido por su incomparable técnica, y de sus dos campeonatos del mundo, Clark se distinguía por su carácter sobrio e introvertido, que lo mantenía alejado de los excesos y la opulencia asociados al mundo de las carreras. Quizá fue su rápido ascenso en el automovilismo —en el que comenzó por hobby, en su granja con un Sunbeam Talbot— el que hizo que no disfrutara de la fama al mismo nivel que sus contrincantes y que permaneciera alejado de las cámaras.

Pero, eso sí, Clark disfrutaba los beneficios de su éxito y, a pesar de su sencillez, siempre se le reconoció por tener un estilo impecable del cual se puede percibir la influencia parisina, donde residía. Sus básicos (polos, suéteres y pantalones de vestir a la medida) conservaron su esencia clásica en una época en la que la moda empezaba a romper los estereotipos con las nuevas propuestas de diseñadores como Yves Saint Laurent y Hubert de Givenchy.

Jim Clark - F1
Jim Clark

James Hunt - 1970

Talentoso, divertido e insolente, este genio del automovilismo era como un shot de adrenalina para todos los que estuvieran a su alrededor. Describir al playboy de las carreras puede resultar algo redundante en el marco de una década en la que la norma era vivir al límite. Pese a ello, una vida llena de mujeres y excesos convirtió a James Hunt en una celebridad que destacaba por su comportamiento poco convencional, dentro y fuera de los circuitos. Amante de los deportes desde joven, y acostumbrado a los triunfos, a los 18 años decidió que iba a ser campeón del mundo de la Fórmula 1 y comenzó a prepararse en un Mini Cooper, sin preocuparse por la oposición de su familia.

El talento que poseía era innegable, además de contar con un atractivo y una personalidad extrovertida que lo convirtieron en uno de los más populares entre el público, al que entretenía continuamente diciendo exactamente lo que pensaba. Su estilo era un reflejo de la tendencia bohemia de los años 70 y, aunque demostrara poco interés por arreglarse, su presencia imponente colaboraba para que siempre luciera atractivo. Despeinado, con jeans deshilachados y descalzo —como solía estar— se mantuvo en la cima como uno de los principales ídolos con largas filas de admiradoras.

James Hunt - F1
James Hunt

Alain Prost - 1980

Más de una década de victorias cuidadosamente estudiadas con un metódico carácter lo convirtieron en “The Professor”. La frialdad y la precisión de este enigmático piloto francés, cuatro veces campeón del mundo, así como su personalidad equilibrada, fue lo que lo diferenció del resto, en la pista y en su vida personal. Siempre en un mood calmado, Prost poseía una habilidad extraordinaria para evitar situaciones conflictivas que le ayudó a ganarse un lugar entre los mejores pilotos de la historia de la F1. Incluso, tras su controvertida rivalidad con el aclamado brasileño Ayrton Senna. A raíz del conflicto entre ambos, su popularidad con los aficionados pudo verse ligeramente afectada, pero no el reconocimiento ni su renombre, que le valieron el apodo de “El profesor”, por la manera teórica en la que corría: pausada y analizando cada curva. El mismo enfoque conservador le daba forma a su apariencia, con un look casi siempre deportivo y relajado que complementaba su carácter a la perfección.

Alain Prost - F1
Alain Prost

Ayrton Senna - 1990

Un ícono en toda la expresión de la palabra que se ganó la admiración del mundo en menos de 10 años. Una vida corta pero amplia. En poco más de 30 años, Ayrton ganó miles de seguidores, no sólo por ser considerado uno de los pilotos más rápidos de la historia, sino por todo lo que representaba su estilo de vida, convirtiéndose en una superestrella de este deporte. Veloz y agresivo en las carreras, pero amable y carismático con la gente alrededor, el brasileño iluminaba cada lugar donde se presentaba y conquistaba a quién se proponía con una seguridad implacable que, a veces, dejaba vislumbrar un rastro de egocentrismo.

Su estilo pulcro de influencia preppy y, por supuesto, su físico, también fueron claves en su vida, sumando admiradoras y fanáticos que, más allá de seguir su carrera, imitaban cada una de sus propuestas, que la mayoría de las veces incluían mocasines, camisas fit y un par de lentes de lujo. Su historial de amantes incluye un sinfín de modelos que desfilaron a su lado, pero su más grande pasión siempre fue correr y lo demostró en cada momento retándose a sí mismo sin importarle nada con tal de triunfar.

Ayrton Senna - F1
Ayrton Senna

Michael Schumacher - 2000

Una leyenda que rompió todos los récords para convertirse en el mejor representante de la F1 que nos ha regalado el nuevo siglo. El nivel de competitividad de este alemán lo colocó en la cima año tras año batiendo todos los récords existentes desde que comenzó la Fórmula 1, en 1950. Desde sus inicios, superó las expectativas aunando las mejores características de los pilotos más reconocidos de la historia, a lo que le sumaba una gran dedicación, incluso fuera de la pista. Pero, a diferencia de muchos, la fama y el reconocimiento social no le interesaban en absoluto. Por el contrario, siempre buscó la privacidad de su familia e intentó llevar un estilo de vida lo más normal posible, totalmente diferente a la típica vida de rockstar.

Pese a ello, su forma de vestir era lo más cercano a una celebridad. Siempre con detalles rockeros, como chamarras de piel, lentes llamativos, relojes de lujo y collares, su look mostraba al máximo el lado implacable y dominante de su, por otro lado, sobria personalidad. Con una mirada enigmática y una ligera sonrisa, Michael nunca se veía cómodo ante el ojo público, pero dentro de un coche hacía maravillas.

Michael Schumacher - F1
Michael Schumacher

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