Yates del futuro
El astillero alemán Blohm + Voss de Hamburgo convoco a la prestigiosa arquitecta anglo-iraquí Zaha Hadid, para diseñar el concepto de una nueva línea de súper yates de lujo bautizada como Unique Circle.
El diseño general está inspirado en la dinámica de los fluidos y los ecosistemas submarinos que consiste de una embarcación de 128 metros de eslora que se distingue por sus claras líneas hidrodinámicas y su “exoesqueleto” (en palabras de Hadid) de la parte superior, que dibuja un entretejido futurístico de aspecto orgánico formado por líneas curvas de distintas dimensiones y espesor. Este diseño curvilíneo, tan característico en los proyectos de Hadid, crea una suerte de red que comunica los distintos niveles de la embarcación y evoca la naturaleza propia de los fondos marinos.
A partir de este proyecto inicial, o prototipo maestro, diseñado por el estudio Hadid Arquitects junto con los experimentados ingenieros navales de Blohn + Voss, se desarrollará una línea de cinco megayates de 90 metros de eslora. El primero de la serie, al que han denominado Jazz, tiene el linaje del prototipo de 128 metros de eslora, pero con una proa más aguda y sólida que se ensancha hacia la parte posterior. Podrá alcanzar una velocidad crucero de 14 nudos y una velocidad máxima de 16 nudos, debidas a su doble motorización de 2.900 caballos de fuerza cada una.
“Cada uno de los yates será desarrollado individualmente a partir de una ingeniería que integra las necesidades hidrodinámicas y estructurales de la embarcación, junto con el más alto confort, el diseño espacial y la seguridad”. A diferencia de las curvas naturalistas de estilo futurístico del exterior, el interior de estos megayates es más tradicional y se inclina hacia un minimalismo opulento. Sin embargo, están diseñados de manera tal que el interior y el exterior fluyen y se fusionan entre sí con naturalidad.
Esta grandiosa metodología común en el desarrollo de prototipos está puesta al servicio de una línea de yates súper exclusivos que podrán disfrutar sólo seis afortunados. —Nicolás R. Pérez