¿Te despidieron? Guía rápida para enfrentarlo
El shock generado al recibir la noticia es la situación de más peso para el empleado que debe esforzarse en superar, además de resolver problemas legales, menciona Sotelo Arias.
El despido es una decisión unilateral del empresario, en tanto el colaborador enfrenta el escenario de tener que identificar el porqué de su salida.
Lo inmediato es terminar los trámites administrativos con tu patrón anterior, tener claro el monto correspondiente de finiquito y si es necesario recurrir a asesoría jurídica. “Antes de firmar una renuncia y aceptar el cheque, bajo las condiciones establecidas por la empresa, debes saber si la causa de despido es justificada”, asevera Claudia Flores, especialista en derecho laboral por la UNAM.
El artículo 47 de la Ley Federal del Trabajo establece las causas de recesión de la relación laboral, entre ellas actos de violencia durante las labores, revelar los secretos de fabricación o asuntos de carácter reservado en prejuicio de la empresa, o cometer actos inmorales en el lugar de trabajo.
“Salir con la excusa de que el despido es producto de problemas financieros en la compañía no es válido y se puede buscar asesoría legal”, precisa Flores.
Actuar con rapidez
Sólo 14% de las empresas en México planea incrementar su plantilla de colaboradores en el primer trimestre del año, dos puntos menos que en el mismo periodo en 2014, según la Encuesta Expectativas de Empleo de Manpower.
Ante este escenario hay que actuar rápido para ubicar nuevas ofertas , pero el tiempo que pase para iniciar la búsqueda depende de la reacción emocional de cada colaborador.
“Tiene relación con qué porcentaje de tu vida ocupa el trabajo. Si está por encima de la diversión, de tener una vida personal, es como si hubieras perdido todo. Pero si cuentas con una red personal que puede ayudar en ese momento, la situación se vive diferente”, menciona Sotelo Arias.
De acuerdo con la directora del CEEPI, un despido “se ve venir”, el jefe no lo dice, pero a través de sus conductas y la condición de la organización, la persona se percatar si su puesto está en riesgo.
“Si la gente está muy conectada con lo que hace lo más probable es que sepa leer con anticipación que el momento de salir se aproxima. Para ese perfil, el shock y su capacidad de reacción es diferente a quién no prestó atención a las alertas laborales”, explica.
Crear una estrategia que contemple avisar a los contactos y familiares sobre la salida, actualizar lo relacionado al perfil laboral e incluso buscar a reclutadores con quienes se haya tenido contacto en otra etapa laboral, son un buen comienzo.
“Debes hacerte visible y evitar dos errores, callar la noticia al núcleo social por vergüenza, y estacionarse en un sentimiento de enojo más no de proactividad”, subraya Claudia Sotelo.