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Las 8 señales que "anuncian" tu despido

Para que estés preparado y puedas cambiar de estrategia, te compartimos las señales de que podrían despedirte.
mar 29 julio 2014 01:24 AM
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Getty Images -

Ser funcional cumplir tus objetivos y ser responsable no siempre es suficiente para conservar tu trabajo. Según los expertos, en el 60% de los casos de despido, la mala relación con el jefe y colegas acelera la salida de los empleados de una empresa. El 40% de los factores que propician la salida de un empleado se vinculan a cambios estructurales.

¡Los expertos de CNNExpansión han hablado! No siempre puedes controlar tu situación laboral. Hay veces que tu despido tiene que ver más con una situación económica de la empresa pero no por eso te puedes dormir en tus laureles y dejarle tu suerte al destino. Para que estés preparado, puedas cambiar de estrategia y conservar tu trabajo, te presentamos 8 señales de que eres blanco de un posible despido. 

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1. La indiferencia de tu jefe

Bien dicen por ahí que la indiferencia es peor que el odio. Si tu tenías una excelente relación con tu jefe y de la nada cambió, ¡ojo! Si tu superior no para de hablar de como no has cumplido ciertos objetivos y de la nada le nació demasiado interés por tus horarios y actividades, estás en la mira. 

Si notas esta actitud, intenta acercarte a él. Platica sobre tus objetivos, intenta recuperar tu relación con él y cambia de estrategia para que los resultados estén a tu favor.

2. La falta de tiempo

¿Te adelantaste al punto anterior y fuiste a hablar con tu jefe pero él nunca tiene tiempo para ti? ¡Cuidado! Si tu superior siempre está ocupado y nunca tiene tiempo de hablar contigo, podrías estar en peligro. 

Es claro que hay diferentes tipos de jefes. Algunos, se limitan a llevar una relación laboral con sus empleados y no hacen el esfuerzo por saber más de ellos. Si ese es tu caso, tampoco te pongas paranóico. Ahora, si tu jefe sí muestra interés por sus empleados y de la nada cancela todas sus juntas contigo y te pide que alguien más esté completamente enterado de los avances de tus proyectos, ¡abre los ojos! Podrías estar en riesgo.

Si este es tu caso y estás muy interesado en conservar tu trabajo, acércate a tu jefe y demúestrale lo talentoso que eres y lo comprometido que estás con la empresa. ¿Cómo? Nada habla mejor que los resultados. 

3. Planes a futuro... ¿qué es eso?

¿Tu jefe nunca hace contigo planes a futuro y no muestra interés por tu crecimiento? Evidentemente es por algo. Mostrar interés en crecer y mejorar es fundamental para que tu jefe te tome en cuenta. Si ya lo dejó de hacer, es por algo (generalmente no por una buena razón). 

Para evitar llegar a esta situación, nunca dejes de hacer evidente el interés que tienes por crecer y mejorar. "Actions speak louder than words", no es cuestión de sólo platicarlo en todas las juntas. El truco está en proponer proyectos y llevarlos a cabo. A veces no vas a obtener los mejores resultados pero que nunca quede en ti. 

4. ¿Eres el último en enterarte de lo que sucede?

Típico. Todo el mundo sabe qué tiene que hacer en su área y hasta están enterados en que proyectos estás antes que tú. Si nunca te enteras de nada, así sea de chismes laboral, ten cuidado. 

No pases desapercibido. ¡Involúcrate un poco más! Tus colegas no tienen que ser tus amigos pero sí tus compañeros. Lleva una buena relación con ellos e intenta mantenerte al día con todo lo que pasa en tu oficina. Recuerda, la información es poder. 

5. Dejaste de formar parte de las actualizaciones

¿Todo el mundo tiene cursos de actualización, de liderazgo o de aprendizaje y tú no? Foco rojo. Es bien sabido que las empresas invierten tiempo y dinero en sus mejores empleados. Si nunca te han ofrecido este tipo de "upgrades", estás en peligro. 

Antes de invitarte a formar parte de algún tipo de actualización, la empresa va a evaluar que tan productivo eres. Si además de no cumplir con tus objetivos tienes la peor actitud del mundo, te puedes ir despidiendo de tu trabajo. El error no es equivocarse, el error está en no querer solucionarlo. 

6. Tu actitud en el campo laboral

Las cundo causas más comunes de despido son:

1. Lenguaje soez (38.4%)

2. Chismes en el lugar de trabajo (33%)

3. Beber alcohol en el trabajo (35.2%)

4. Salir de la oficina sin decir nada a nadie (33.6%)

5. Recibir demasiadas llamadas personales (28%)

Todas las razones son bastante obvias, ¿no? No importa que tan mal te caiga algún compañero, nunca es justificable hablarle mal o meterte en chismes. No te mandas sólo, no te cuesta nada avisarle a tu jefe de tus movimientos y puedes ganar mucho. Si tu esposa o novia es amante de hablarte a la oficina para reclamarte o decirte cuanto te quiere, ¡ponle un alto! Y bueno, de tomar en la oficina ni hablamos. 

7. La venta de la empresa donde trabajas

Si la compañía donde fue adquirida por otro grupo, seguramente hay alguien más que hace tu trabajo y duplicar funciones aumenta los costos de la compañía. Es recomendable preparar un informe detallado de por qué uno se considera valioso para la organización. Por favor, no te des a conocer por tonterías y no hables mal del jefe o del ambiente laboral con los nuevos directivos. 

8. Tu jefe, ¿demasiado controlador?

Si ahora tu jefe parece llevar un registro de todas las acciones realizadas en el horario laboral, incluyendo los minutos extras de la hora de comida, y los utiliza para reprochar un mal rendimiento... ¡las cosas no están bien! 

Si ya tienes a tu jefe sobre ti, lo mejor que puedes hacer es adelantarte y evitar cometer cualquier tipo de error.

Ahora, si tu situación laboral corre peligro y a ti no te interesa hacer nada para solucionarla o tu objetivo en la vida no es quedarte en el lugar donde trabajar, mejor vete con la cara en alto y no te quemes. El mundo es muy pequeño y nunca sabes de quién puedes necesitar en un futuro. 


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